El edil, Eduardo Rivera Pérez rindió su primer informe de gobierno en el Centro de Convenciones Puebla, acompañado de su amigo el gobernador de Puebla, Miguel Barbosa Huerta.
Entre sus constantes justificaciones por una mediocre administración, el alcalde le agradeció a Dios por permitirle estar en la presidencia municipal nuevamente.
Iniciando con una cita de Mario Benedetti en donde dice: “5 minutos bastan para soñar toda una vida, así de relativo es el tiempo”, el alcalde del Municipio de Puebla contó una extraordinaria historia ficticia, en donde la gente está feliz por todas las mentiras presentadas, tales como sus supuestos programas de bacheo, o los proyectos de seguridad, o que privatización el agua beneficiaría a la ciudadanía.
Durante su informe, el mandatario municipal omitió explicar que la Ciudad que preside, ahora se encuentra endeudada, cuando la anterior administración la dejó totalmente libre de deuda pública.
También omitió el terrible ecocidio de los árboles en el Centro Histórico, de los cuales se presentarían los estudios que avalaran dicha tala, sin embargo, a más de un mes, eso no ha ocurrido.
De igual manera, omitió que tan sólo en un mes, gastó más de 500 millones de pesos, dinero de las y los poblanos, con el único fin de promocionar su imagen; también omitió que la mitad de su recurso público es dinero que se destina a gastos personales, tales como sueldos, alimento, transporte, alojamiento, internet etc.
Del mismo modo, no dijo que recibe más de 4 mil millones de pesos anuales para programas de bienestar por parte del Gobierno Federal, así que los programas que presume, son auspiciados por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Este informe de gobierno se ha caracterizado por una constante ola de mentiras, y justificaciones por no saber hacer bien las cosas.