En su gira por África, en las antiguas colonias francesas, Macron se ha encontrado con el creciente sentimiento antifrancés por parte los colonos africanos, quienes se han enfrentado a una terrible carencia de productos básicos debido a la inflación, inflación causada por los aranceles que ha impuesto Europa a Rusia, por lo cual ellos no pueden abastecerse de sus insumos diarios; químicos tan importante como los fertilizantes, o granos tan básicos como el arroz y trigo se han quedado en el olvido. Al observar las carencias y escuchar las demandas, el presidente francés intentó lavarse las manos con la siguiente declaratoria:
“Los alimentos, como la energía, se han convertido en armas de guerra rusas (…) Debemos ayudar al continente africano a producir más para sí mismo”.
Debido a la crítica que hizo el Partido Acción Nacional (PAN) al gobierno de México, ya que decidió no enviar armas a Ucrania cuando lo solicitaron, el presidente nacional del partido, Marko Cortés Mendoza, decidió iniciar una campaña en dónde sus militantes lleven panes y cafés a la guerra con Ucrania, todo esto con un enfoque de solidaridad y unión, esta idea surge a raíz de las declaraciones de Macrón, en donde dijo que los rusos tenían los alimentos como armas.
“No nos quedaremos con los brazos cruzados, les enviaremos toda la fuerza del PAN, para que puedan defenderse”, dijo después de embolsar unas teleras y subirlas a un avión.
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