La agonía para definir a la o el candidato de Morena en Puebla podría prolongarse más allá del 30 de octubre, fecha en la que la dirigencia nacional del partido lopezobradorista determinó para dar a conocer los resultados de la encuesta de la que saldrá el o la abanderada de la 4T para los comicios del próximo año.
Y es que, el acuerdo de paridad del INE para que los partidos políticos cumplan con la postulación de cinco mujeres y cuatro hombres en las ocho gubernaturas y la jefatura de la Ciudad de México, que será discutido otra vez la mañana de este martes, alterará el calendario morenista que tiene nervioso a más de uno en la aldea.
Qué equivocados están quienes creen que ya está todo definido en la interna de Morena en Puebla y en el resto de las ocho entidades que renovarán sus gobiernos en 2024.
La narrativa del “dedazo” de Andrés Manuel López Obrador se desinfla y va perdiendo a diario veracidad, mientras la incertidumbre sobre el perfil que representará los colores y siglas del Movimiento Regeneración Nacional aumentan.
Contra todo pronóstico, será el Consejo General del Instituto Nacional Electoral el que tenga la última palabra para que los partidos políticos y coaliciones definan a cinco candidatas y cuatro candidatos que buscarán los gobiernos de la Ciudad de México, Puebla, Veracruz, Morelos, Tabasco, Chiapas, Jalisco, Guanajuato y Yucatán.
Tras la atropellada sesión del pasado jueves y luego de la ‘chicanada’ de la secretaria ejecutiva, María Elena Cornejo; y de la consejera presidenta Guadalupe Taddei, con la que se detuvo –más no evitó– la aprobación del acuerdo de paridad será este martes cuando estos lineamientos, que obligará a los partidos a entregar a las mujeres al menos cinco candidaturas de las nueve en los estados bajo criterios de equidad, igualdad sustantiva y equidad, queden aprobados.
El techo de cristal se va a romper a pesar de la resistencia.
Este nuevo acuerdo al que tuvo acceso este reportero, además de las variantes ya mencionadas en el párrafo anterior, tiene una nueva característica que se agrega al que fue rechazado la semana pasada: la alternancia.
“Como medida compensatoria, los PPL deberán observar la alternancia respecto al género postulado en la última elección para la gubernatura, cuando el cargo haya sido ocupado por un hombre”, se puede leer en el séptimo punto relativo a la determinación del acuerdo.
“Se mandata a los PPL para que respeten el principio de alternancia de género que hubieran postulado en la última elección para la gubernatura y Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México”, señala el punto tercero del acuerdo.
La entidad poblana es el ejemplo perfecto que encaja en esta variante de la alternancia.
Si recordamos, el Movimiento Regeneración Nacional postuló en las últimas dos elecciones en Puebla (la ordinaria del 2018 y la extraordinaria del 2019) a un hombre como su candidato, en la figura de Miguel Barbosa, para ambos comicios.
El acuerdo no estipula la naturaleza de la elección y solo menciona “última elección”, por lo que la victoria de Barbosa Huerta en la extraordinaria del 2019 es otra obligación que Morena deberá observar para postular ahora a una mujer como su candidata en Puebla para luchar por el gobierno del estado.
Con este acuerdo que será aprobado de forma inevitable, el CEN de Morena deberá reservar a Puebla para una mujer, por lo que tendrá que notificar al INE que el estado cumplirá esta cuota de equidad y deberá publicar otra vez la convocatoria que será exclusiva para el género femenino, como así lo mandatan el apartado I del punto 13 del acuerdo.
En el caso del PAN la situación es la misma, pero con ventaja para el género masculino, pues en la elección del 2018 el partido azul postuló a Martha Erika Alonso como su candidata, por lo que ahora podrá ungir a un hombre como su abanderado, que será Eduardo Rivera.
Si bien Enrique Cárdenas fue candidato de Acción Nacional en la extraordinaria del 2019, debemos recordar también que el exrector de la Udlap fue postulado por Movimiento Ciudadano y el partido albiazul se sumó a él en candidatura común.
La sesión del Consejo General del INE del martes podría darle un giro de 180 grados a la sucesión en Puebla.
¿Será que sí es tiempo de las morenas?
Por lo pronto lo único cierto es que la paridad va.