Fue la ex presidenta Claudia Rivera Vivanco, la primera mujer en darle la oportunidad a Yasmín Flores de poder ejercer su carrera en el servicio público. La panista tenía antecedentes que no le favorecían. No mucho tiempo antes, Pablo Rodríguez Regordosa ya había hecho públicas las mañas de Yasmín de denunciar por “violencia de género” cuando sólo buscaba beneficiarse. Llegó a la oficina de presidencia municipal recomendada de Javier Palou García, hijo del gran Pedro Ángel Palou. Y aún en contra de voces cercanas a la presidenta que le recomendaban no aceptarla por el riesgo que representaba, la ex alcaldesa fiel a su causa y desde su visión feminista, le extendió toda la confianza.
Desde el primer día que entró al ayuntamiento, comenzó a tener problemas con todas las áreas pues buscaba destacar e imponerse a los demás. Esto, a pesar de un nivel muy básico que demostró como abogada. No pasaron ni tres meses para que empezara a hablar muy mal de la presidenta, y a comenzar a trabajar en su contra. Durante el proceso de Juntas Auxiliares de enero de 2019, estuvo «operando» en varias juntas auxiliares contra las planillas de Gobernación Municipal y de Presidencia.
Si bien no logró cosechar ninguna victoria, estos movimientos le hicieron creer que podía ser Secretaria de Gobernación, y continuamente se encontraba formando parte de intrigas, que incluía a los regidores de oposición (G5 y PAN) para intentar tirar a René Sánchez Galindo. Naturalmente tanto tiempo dedicado a conspiraciones e intrigas, que nada tenían que ver con sus obligaciones laborales, provocaron que las tareas de la consejería quedaran la mayor parte desatendidas, dependiendo la Presidencia de la asistencia legal brindada por la Sindicatura y la Secretaría del Ayuntamiento.
Esta situación de inoperancia sumado a un limitado conocimiento en autonomía municipal, evidenciaron que la abogada no podía ayudar de ninguna forma a defender lo que establece el artículo 115 constitucional, contra los retos políticos y jurídicos que planteó en materia de seguridad pública con el Gobernador, haciendo insostenible la continuidad de Yasmín en esa área de la estructura orgánica.
En junio de 2020 se lleva a cabo el enroque, y aún después de constantes pruebas de deslealtad y una personalidad que desconoce por completo el diálogo y el respeto, la presidenta le permite continuar y envía a Yasmín a la Coordinación de Proyectos Estratégicos. Ahí recibiría la encomienda de entrar en contacto con juntas auxiliares, siempre con la instrucción de coordinarse con SEGOM.
Yasmín toma su salida de la Consejería muy personal, y en la Coordinación de Proyectos Estratégicos aplica la misma estrategia de 2019: usa su cargo para buscar aglutinar una fuerza en las juntas auxiliares y operar a en favor del mejor postor. El modo también es el mismo, pues reúne a los presidentes auxiliares en continuas comidas donde su agenda además de criticar e insultar abiertamente a la Presidenta, tenia por objetivo sabotear las acciones de gobierno.
La situación de quiebre viene unas semanas después, cuando tiene lugar la acusación de que estaba siendo «perseguida». La acusación originalmente era en contra de René Sánchez, ya que René ignoraba sus juegos e intentos de chantajes. Al saberse ignorada Yasmín comienza a ponerle en contra a la gente de la central de abasto, y a presidentes auxiliares, haciendo atribuciones que no le correspondían pero en las que por supuesto se ofrecía a apoyar cuando se requería mediación jurídica. Justo en esos días su insistencia en destituir a René se intensificó, al punto de los gritos, pues dijo que ella merecía más ese puesto. Posteriormente en su propio laberinto acosó y ofendió a Margarita Darwish, incluso aventándole su camioneta en trayecto a una junta auxiliar. Por si fuera poco también denostó a ex regidor y ahora diputado local, Iván Herrera, grabándolo sin su consentimiento, intentando una vez más ver la forma de construir un posible chantaje.
Posterior a ello, Yasmín sale del gobierno municipal y comienza la presentación de denuncias ante la Comisión de Derechos Humanos del Estado, por la vía de juicio de amparo la electoral, argumentando violencia política de género, sin mencionar que por su personalidad cambio sus declaraciones en 3 expedientes las cuales presentó ante 3 diferentes órganos competentes.
DATO CURIOSO. Después de salir del ayuntamiento Yasmín acudió con el ex gobernador Miguel Barbosa para venderle la posible denuncia contra Rivera Vivanco, y así intentar inhabilitarla para el proceso del 2021. Esto evidentemente no se logró, pero lo que si quedó grabado en la mente de muchos de sus cercanos fue la respuesta contundente del ex mandatario con enorme callo político: “págale por fuera, pero a nuestro gobierno no la metas”.